sábado, 27 de diciembre de 2008

Soy lo peor…

Y no… No estoy orgulloso de ello. No he tocado el blog desde hace más de mes y medio, y me he dejado muchas historias a medio contar. Sé que muchos leéis ávidamente esta pequeña colección de legajos digitales. Algunos me habéis reprochado el que no haya escrito nada en todos estos días. Cuando me he encontrado a algún conocido por Madrid la mayoría de las conversaciones transcurren de la siguiente manera “¡Hombre, tú por aquí!”, “Sí he llegado hace poco ¿Qué tal todo?”, “Bien, ¿Y tú qué tal? Como ya no escribes en el blog, no nos enteramos…”.

Para que os hagáis una idea de lo mucho que me queda por contar, ya estoy en Madrid disfrutando de unas buenas vacaciones. Pero no siempre ha sido así. Hasta el 11 de diciembre he tenido excusa para no escribir entradas en el blog. La vida en el IIT es más dura de lo que jamás me imaginé. Las últimas semanas en Chicago estuve entretenido haciendo los cuatro proyectos finales que tenía que entregar, y estudiando los cuatro exámenes finales que tenía que presentar justo después (cuatro exámenes finales en tres días… qué delicia). Ha habido días en los que me he tenido que renunciar a dormir para sacar el trabajo adelante. Una vez pasada la tormenta, me he dedicado a resolver papeleo, a preparar el viaje de vuelta y, desde que he llegado a Madrid, a frotarme la bolsa escrotal como está mandado.

Pero todo bueno tiene un final. Y es que uno no puede estar tirado a la bartola todo el santo día si quiere sacar una ingeniería, un máster y un blog adelante. Así que desde hoy me voy a poner las pilas para chapar de cara a los exámenes que tengo pendientes aquí en Madrid (“Mmm… Redes I… Volvemos a encontrarnos…”). Y por supuesto también voy a actualizar el blog, para que cuando esté de regreso en Chicago pueda brindaros con una crónica detallada y de última hora de mi vida por esas tierras (esto último no me lo creo ni yo, pero bueno, la intención es lo que cuenta).

No dejes de leer “Civis Chicagolensis Sum”.

1 comentario:

Israel dijo...

Cierto, eres lo peor.
Pero también es verdad que hay veces en las que no se puede seguir el ritmo de publicación!
Un abrazo y feliz año!!